Publicado: 16 de Junio de 2019
La importancia del deporte, así como del recreo y del juego en el desarrollo del niño, ya han sido puestos de relieve por UNICEF en numerosas ocasiones. De acuerdo con algunos estudios previos emprendidos por la organización, el deporte conlleva múltiples beneficios potenciales en niños y adolescentes, entre ellos, los siguientes: mejora de la salud, reducción del estrés y la depresión, mayor confianza y autoestima, mejora del aprendizaje y los resultados escolares, menor probabilidad de tabaquismo y consumo de drogas ilegales, y disminución en los índices de delincuencia.
- Para lograr resultados positivos, es necesario:
. Facilitar una capacitación de calidad y normas claras para los entrenadores y monitores: estos desempeñan un papel trascendental en la generación de resultados beneficiosos para los niños, dado que pueden transmitir conductas positivas y dar un buen ejemplo.
. Crear una cultura de participación
positiva: debe dedicarse especial atención a evitar que las iniciativas
deportivas refuercen actitudes y normas socioculturales negativas que conllevan
un riesgo para los niños o que merman los objetivos de las iniciativas, tales
como culturas deportivas que enfatizan la violencia y las relaciones de poder.
No obstante, además de lo anterior, es fundamental recordar que el deporte no va a resolver todos los problemas a los que se enfrentan los niños y los jóvenes. Por tanto, debe recordarse la importancia del papel que tienen las familias y escuelas en el desarrollo de los menores.
Silvia Bautista. Psicóloga. Collado Villalba. Madrid